Eramos inmortales, juntos.
Eramos insaciables. Teníamos sed a todas horas, sed del uno al otro. No existía el tiempo, no había reloj que marcara caricias ni cronómetros que contaran los besos. ¿Dónde quedamos?¿Dónde quedó lo nuestro? ¿Quien eres ahora?¿Quien soy ahora?
Todo ha cambiado. Hay un reloj, un reloj que avanza. Ya han pasado tanto días, meses. ¿Dónde estás?¿Qué es de ti? ¿Puedes escucharme? Te echo de menos.
Quiero que vuelvas. ¿Sigues siendo tu? Quiero comprobarlo. Vuelve, recobremos el tiempo. Rompamos los esquemas, gastemos nuestros labios.
Eramos quedó en pasado. Quiero un futuro, y lo quiero ahora. Presente.
Solo quiero creer.